El equipo que dirige Darío Giuliani ganó 4 a 2 ante el último campeón, Olimpia. En un partido vibrante los Azules de la Villa Mallea vuelven a los más alto del hockey nacional.
Gentileza: Cuarto Tiempo; Por Sergio Caballero; Fotos: Comite Nacional
El partido estuvo parejo en los primeros diez minutos de juego. Olimpia con sus armas trató de quebrar al Gamuza Gonzalo Aguirre, pero el experimentado arquero de la Villa Mallea respondió a la altura. Ele quipo de los Giuliani tuvo un penal claro en el área turca que pudo darle un gol a Concepción, pero Mauro Giuliani no pudo contra Adolfo Harica que tapó muy bien. Pero en la jugada siguiente tomó la bocha Giuliani en la mitad, avanzó con ella algunas patinadas para cruzar la mitad de la cancha y sacó un sablazo que estampó el primero del partido y el grito que desahogo de la familia cepeciana en las tribunas.
Pero el Olimpia defendía el titulo y fue a buscar la paridad. Cuatro minutos pasaron y Sergio Bueno sacó remate muy fuerte de afuera del área, Aguirre tapó y el rebote con marca y todo la tomó Luca Tabarelli que apenas picó en el parquet, cacheteó al arco. El empate ponía justicia en un partido de mucha adrenalina, con poco para jugar con la bocha, pero que mantuvo al vilo a todo el ambiente del hockey argentino. Lo mejor para el publico que había más, muchos más
En al continuidad de la cadena de emociones que tuvo el encuentro. Cuando solo faltaban tres minutos para descansar, llegó un error en el ataque de CPC, Tabarelli tomó lo bocha y enfiló para el arco rival, aguantó la marca y descargó hacia atrás para que Sergio Bueno defina sin problemas, el segundo gol de Olimpia y los turcos que empezaban a soñar con repetir la hazaña del año pasado en Mendoza. Pero enfrente estaba la fábrica campeones y lo hizo valer. El primer tiempo estaba punto de cerrarse, solo un minuto y monedas quedaban para el final, Concepción atacó por todos lados, Giuliano Giuliani tomó la bocha en su campo, cruzó la mitad, hizo una diagonal grande para hamacarse y sacar un remate que entró justo en el hueco que fabricó su compañero Lautaro Luna. Los Azules empataron antes del descanso. La final podía ser para cualquiera, como al principio de la historia estaban iguales en le marcador, salvo que ahora solo quedaban 20 minutos de juego.
El partido transcurrió con mucha dinámica, el que menos errores cometa podía quedarse con el pleito. En el segundo tiempo la cabeza de fría de los chicos de Concepción pudo más, tuvo la paciencia necesaria para encontrar el camino para abrir el partido a su favor. A los 8 minutos del segundo tiempo llegó otra vez una jugada del más lúcido del torneo. Giuliano Giuliani que pasó detrás del arco, aprovechó la distracción de Harica y coló la pelota por el primer palo. Si un gol común, pero es raro que alguien se anime a tirar en una final de alto voltaje como la del Estadio La Superiora. Concepción gana el partido y empieza a decantar todo a su favor.
Al final Olimpia sin tiempo, metió todos de campo y jugó si arquero. Los nervios hizo que perdieran la pelota y de contra llegó Marcos Vega para definir sin arquero y cerrar una noche maravillosa del CPC.