(por GeEse)
Por la primera semifinal de la jornada se enfrentaron el local Holanda versus su similar de Inglaterra, quedando el triunfo y el consiguiente paso a la final para el equipo de los dueños de casa por uno a cero, gol convertido a los 31′ de la primera etapa que a la postre resultara decisivo y transportara a los naranjas a una nueva final mundial en su rica historia de nuestro deporte. Los del Reino Unido jugarán por un un lugar en el podio el próximo domingo, pero aunque esta tarde estuvieron cerca en el marcador, nunca lo hicieron en el trámite del juego, quedando demostrado una vez mas, que la empresa les resultó un puente demasiado lejos.
La Operación Market Garden fue un fracaso militar de los aliados durante la Segunda Guerra Mundial, el film estadounidense de 1977 A Bridge Too Far, traducido en la Argentina como “Un Puente Demasiado Lejos”, cuenta la historia del intento del Primer Cuerpo Aerotransportado de tomar los puentes detrás de las líneas enemigas, plan pergeñado por el reconocido Mariscal de Campo Bernard Montgomery y llevado a cabo sin éxito, por el Teniente General británico Frederick Browning, a quien después de la derrota se le atribuye la frase: “Siempre creí que intentabamos tomar un puente demasiado lejano”. El puente en cuestión era el de la ciudad de Arhem, entre otros, que queda a solo 70′ de La Haya, lo mismo que hasta este torneo dura un partido de hockey.
Con un Kyocera Stadium repleto, la tensión competitiva se notaba en los rostros de los jugadores en el momento de los himnos y la arenga de los anfitriones apretados en ronda, formaban un compacto racimo humano consustanciados en el objetivo a cumplir. Los de la Rubia Albion, con atuendo alernativo blanco, iniciaron el match con todo y de no ser por la atajada de Jack Stockman a solo 30 segundos de comenzado el partido ante un preciso desvío del siempre peligroso Ashley Jackson, el pleito se hubiese puesto cuesta arriba para Neederland. Fue un espejismo, porque de allí en mas todo fue para los dirigidos por Van Ass. De la mano del movedizo Valentín verga, muy bien secundado por el hábil Billy Bakker, Holanda fue creciendo en su juego, arrimando peligro a la valla controlada por George Pinner, dando la sensación que abriría el tanteador en cualquier momento. A los 12′ en el primer corto fue despejado en la línea por el número 18 inglés, Middleton, a los 21′ un revés barrido de Seve Van Ass fue muy bien neutralizado por el arquero . Un minuto después, el argentino naturalizado con esa típica viveza criolla bien entendida, se aproximó por el lado ciego de la salida adversaria, quitó la bocha con su revés y enfiló hacia el arco británico, dejando desparramado al guardameta en el sintético cuando le salió desesperado a achicar en uno contra uno magníficamente resuelto por Verga, con un regate amplio, a su derecha, a máxima velocidad, burlando la igualación activa, pero infelizmente para él, su remate al gol se fue desviado por el poste izquierdo del portero Pinner. Seve Van Ass tuvo la oportunidad nuevamente, cuando un tiro de revés a media altura, se desvió en el palo de un defensor inglés, estrellándose en el travesaño y por centímetros no se transformó en la apertura del marcador. Inmediatamente después se produjo la apertura del score cuando tras el segundo corto de los holandeses convirtió Mink Van Der Veerder con una potente arrastrada desde la primera base a la izquierda arriba de Pinner que nada pudo hacer para evitar tan esquinado remate, cuando corrían 31′ de la primera mitad. Todavía quedó tiempo para una mas de Verga que a los 34′ desvió afuera por muy poco “de taquito” luego de una delicatessen digna de su enorme calidad. El segundo tiempo fue mas tranquilo, pero siempre dentro del mismo tenor. A los 4′ el golkeeper inglés, George Pinner, debió recurrir por enésima vez a sus reflejos felinos para evitar que los jugadores de los Países Bajos celebraran otra conquista, al detener una furibunda arrastrada en ocasión del tercer corto naranja y luego con una mágica pirueta en el aire contener el rebote ejecutado por el siempre peligroso Bakker. A los 13′ se lo perdió Hofman al impactar la pelota de derecha a izquierda digonal con una barrida desde una posición ventajosa. A los 19′ tras el primer corto en contra rechazado por su primer picador, el contra ataque en superioridad numérica de Neederland se diluyó inexplicablemente. Tras cartón, en el cuarto fijo local la pelota vino mal servida a la segunda base, fue corregida por el parador y su golpe rasante se perdió por muy poco. Esta jugada despierta dudas severas, ya que cuesta creer que en el primer nivel en que se está jugando y con la historia detrás del país anfitrión, sin dudas la selección que mas trabaja los córners cortos, haberla servido tan lejos de la posición, cuando menos, levanta sospechas que se trata de una jugada preparada que no fue gol por milímetros. Hay que darle el beneficio de la duda.
A los 28′, el ex hombre de GEBA apareció otra vez, hilvanó una monumental jugada individual, apilando ingleses por aquí y por allá, para demostrar que tampoco es egoísta, cediendole la bocha para que definiera Seve Van Ass y si no terminó en gol fue por la nueva aparición del golero Pinner. Recién a los 31′ por intermedio de un fijo, los británicos se perdieron el empate e inmediatamente después sacaron a su arquero para intentar torcer el resultado, cosa que claramente no consiguieron.
El Teniente General Sir Frederick Arthur Montague Browning nunca mas fue promovido tras el estrepitoso fracaso de la operación Market Garden, pagando las culpas de la errónea planificación aliada, trabajando hasta su muerte en la Tesorería Real del Imperio. Sin embargo, su apreciación acerca de la lejanía del puente, es hoy una expresión común en la isla cuando algo es imposible de conseguir. Esperemos que en ocasión del partido por el tercer puesto entre la Argentina e Inglaterra, los jugadores de la reina tambien se encuentren con un puente demasiado lejos.