Belén Succi y Juan Manuel Vivaldi, junto a Javier Lindolfo, entrenador de ambos en los seleccionados, brindaron la segunda clínica Lekker Keepers.
(Fuente: La Nueva)
El clima esta vez acompañó y los Nº 1 se brindaron al máximo para que los 52 inscriptos a la capacitación de arqueros, que se desarrolló en Universitario y organizó la Asociación Bahiense de hockey sobre césped, obtuvieran un más que soñado aprendizaje.
Belén Succi, arquera de Las Leonas, Juan Manuel Vivaldi, el arquero de Los Leones, y Javier Lindolfo, entrenador de ambos en los seleccionados argentinos, cerraron ayer la clínica Lekker Keepers, que había comenzado el lunes con una la charla con video.
Tanto Succi como Vivaldi, elegidos por la Federación Internacional entre los 5 mejores arqueros del planeta, se mostraron satisfechos por la actividad realizada.
“No conocía Bahía, me pareció hermoso y me trataron muy bien. Esperemos que los chicos se lleven la misma impresión nuestra”, abrió Succi.
“Siempre es un placer venir. Al igual que el año pasado hubo muy buena repercusión y los chicos tienen mucho entusiasmo y responden”, agregó Vivaldi.
–¿Con qué sensaciones se van?
–Succi: Me voy muy contenta. Ojalá que hayamos dejado algo importante. Hubo un gran número de chicos y espero que puedan plasmar cada concepto en sus clubes.
–Vivaldi: Aprovechando la base del año pasado, este año fue mucho más intensivo y los chicos respondieron muy bien.
–¿Qué les genera saber que son piezas importantes para que el puesto crezca día a día?
–S: Me pone muy feliz. Es algo que se disfruta. Siempre buscamos que el puesto siga creciendo. Y que los clubes tengan muchos arqueros es importante para seguir alimentando a la Selección el día de mañana.
–V: Hay muchísimos arqueros en todo el país y le ponemos muchas ganas a esto que nos apasiona porque son chicos como uno.
Visión técnica
Lindolfo se mostró conforme desde todo punto de vista.
“Al igual que el año pasado hubo una gran concurrencia y también un buen nivel de arqueras. Los varones eran pocos pero los tres estuvieron bien”, destacó el entrenador.
–Con respecto al año pasado, ¿se aumentó la exigencia?
–Sí. Lo de hoy (por ayer) fue un poco más complicado y por eso estuvo bueno que los profes vieran el trabajo, ya que ellos son los que deben darle continuidad en sus clubes. Nosotros venimos solamente una vez por año y en un día no se asimila todo lo que enseñamos. Ahí está la mano de los entrenadores locales para no perder el ritmo.
–¿Qué significa ser el entrenador de dos de los mejores del mundo en su puesto?
–Es un aprendizaje constante, tanto en lo que pueda volcarles o lo que su experiencia me puede aportar a mí.