(Producción HAP)
Cronus mediante, luego que sistemáticamente se vayan atrasando los partidos de play off y play out por distintas incidencias en los juegos, nos dispusimos a observar el match q cerraba la jornada en las instalaciones cerveceras de la calle Cevallos, en donde se jugaba en el césped sintético de la cancha número uno, el play out entre el 33ro. de la división “E” la escuadra pincha de Estudiantes de La Plata “B” que pugna por no descender de categoría versus el 10mo. equipo clasificado proveniente de la división “F”, el conjunto tricolor de Agronomía, comandadas por la explosiva entrenadora Carolina Castagnet del club Arquitectura “C”, formado en los albores de la temporada y ya saboreando las mieles de un posible ascenso a la categoría inmediata superior.
Los nervios de las jugadoras de ambos planteles fueron los que predominaron durante los primeros instantes del juego, pero a caballito de la inconmensurable experiencia de sus volantes laterales Melina Asorey y Gabriela Genetti, las arkinas se fueron acercando con peligro a la valla platense que intentaba salir prolijamente desde el fondo, con atildadas rutas de pelota que complicaban el bloqueo de las capitalinas pero que se desdibujaban al ingresar a los 22 metros finales del arco defendido por la longilínea Agostina Campisi.
Por eso no extrañó que las de Agronomía abrieran la cuenta promediando la primera etapa por intermedio de su número 14 Florencia Trapeano quien capitalizó magníficamente una división al círculo y conectó la bocha con un golpe seco y esquinado que dejó sin chances a la correcta arquera Yazmin Capitanio. Aún en desventaja, las dirigidas por Diego Pérez no se desesperaron y continuaron con la saludable intención de darle volumen a su juego, intentado siempre, sin despreciar el buen trato de la bocha a partir del pase y la recepción.
Los 35′ iniciales se fueron con dos jugadas polémicas, ambas a favor de las tricolores, la primera cuando el árbitro Graciana Calvetty anuló un gol de Romina Bumbalo tras un potente golpe de revés diagonal, a instancias de su compañero de dupla arbitral, Manuel Vega, por obstrucción a la arquera de una delantera arquitecta que le impidiera con su movimiento interceptar el disparo y un segundo gol de desvío para el tercer equipo de Arquitectura por no otorgar la continuación de la jugada, tras la primera tarjeta verde de la noche. Cabe consignar, que los árbitros citados tuvieron un desempeño mas que correcto y llevaron las riendas del encuentro con personalidad y buen criterio.
La segunda etapa mostró a un Estudiantes de La Plata “B” mas incisivo, decidido a vender cara la derrota, sumando pases por su derecha, pasando y corriendo, buscando siempre arribar al empate sin traicionar su estilo aunque muchas veces no les salieran las cosas. En el mientras tanto, las chicas de Castagnet, pragmáticas como su entrenadora, intentaban con pases largos pegados y continuas divisiones al área complicar a la defensa pincha y tras un corto pegado por la número 15, la interminable Carola Calabria que fue rechazado parcialmente por la primera picadora adversaria, ésta capturó el rebote y con un delicioso flick frontal al primer palo, hizo estéril el esfuerzo de la guardameta albirroja decretando el dos a cero para su equipo.
Guiadas por su capitana, María José Pérez, las pincharratas se fueron como una tromba en busca del descuento y a 4′ del final, tras una seguidilla de cortos, la experimentada número 79 María Eugenia Pla, logró vencer la resistencia de la aguerrida defensa tricolor, convirtiendo el gol del descuento que deja abierta la definición de este play out para cuando se vean nuevamente las caras, el fin de semana entrante.
El primer chico de este duelo de estilos fue para Arquitectura “C” que con mucho corazón y esfuerzo doblegó a las mejores manos de las chicas de la ciudad de las diagonales. Ambas dispondrán de siete días para lamerse las heridas y velar las armas, aunque mas que esta alegoría de reminiscencias guerreras, vale mas destacar como el talento y el tesón se enfrentaron cara a cara y se respetaron mutuamente, demostrando de manera cabal, que no importa la letra de la categoría o división que se trate, lo que interesa es con la dignidad y pasión con que se hace un deporte.