España Damas: “EL CLUB DE CAMPO SIEMPRE SE PROPONE GANARLO TODO”

Rocío Gutiérrez, Amparo Gil, Alejandra Torres-Quevedo y Begoña García, cuatro jugadoras del Club de Campo, analizan al equipo.

(Fuente: AS; Cronista: Juanma Bellón)

Emilio Cobos (DIARIO AS)

El Club de Campo es el referente indiscutible del hockey hierba femenino en España. El equipo ha ganado 20 veces el título de Liga, el último en 2017. “Tenemos un grupo buenísimo, que se mantiene año tras año. Somos gente muy competitiva y siempre queremos seguir triunfando. Nunca nos conformamos. Cada año nos proponemos ganar todo”, cuentan Rocío Gutiérrez y Amparo Gil, capitana y vicecapitana que llevan 11 y 10 años en el ‘Club’. Una es gaditana (32 años) y otra valenciana (29), pero ya son las jefas que han ganado ocho y siete títulos de Liga. Ahora, de momento dos victorias de dos.

“La Liga Iberdrola tiene muy buen nivel, la de Holanda está diez escalones por encima, pero el resto de países, Alemania, Bélgica… tienen un nivel muy similar al nuestro”, sigue Gutiérrez, defensa, que comenzó a jugar en San Fernando y ahora es referente en el equipo que dirige Edu Aguilar. Más novata es Alejandra Torres-Quevedo, medio de 17, que ya jugó la temporada pasada en el primer equipo. “Ella nos da lecciones a nosotras”, dicen las capitanas y Alejandra añade: “Me dan muchos consejos, me dicen que trabaje, que no sea tonta, que piense. Me sirven de referente”. Su familia es socia del Club de Campo y Ale ha vivido la tradición del lugar desde pequeña. “Siempre tenemos pique con el SPV”, cuenta.

Emilio Cobos (DIARIO AS)

Esta temporada ha habido dos fichajes, el de la alemana Rebecca Grote y desde el ‘enemigo’ SPV Complutense ha llegado Begoña García, delantera aragonesa de 22 años, con el cartel de máxima goleadora del Europeo con cuatro goles. “Si el objetivo es ganar todo, habrá que intentarlo y marcar goles”, dice García, que el año pasado metió 16 goles y comenzó jugando en Zaragoza con chicos. Luego llegó al CAR de Madrid y ahora al Club de Campo: “Es un reto diferente”. Torres-Quevedo y ella sueñan con Tokio 2020.

Una de las cuentas pendientes del Club de Campo es la Champions League. Nunca la han ganado. “Siempre solemos entrar en semifinales, pero luego están las holandesas y es muy complicado”, sigue Gutiérrez. El Club de Campo aspira este año a organizar la fase final de la gran cita europea: “Eso sería una gran motivación”. “El hockey es un deporte raro, pero hay muy buen rollo”, espeta Torres-Quevedo. “Pero luego es muy divertido de ver”, añade Amparo Gil. Es el Club de Campo.