Por: Centrojás; autor: Lucio Stortoni
Ariel Holan se cansó de repetir una y otra vez que para dirigir hockey se inspiró en el fútbol y que soñaba que sus equipos jugasen similar al Ajax de los setenta —equipo que lo enamoró cuando lo vio en vivo en el año 1972— por ello, mientras incorporaba cosas del fútbol en el hockey, aprendía sobre este último deporte, que a su vez tiene cosas muy similares al primero.
Se puede imaginar a aquellos que no se cansan de esgrimir con tono burlón “Ariel Holan fue entrenador de hockey”, que poseen un altísimo conocimiento sobre este deporte debido a que se la pasan analizando los pormenores de la disciplina por TV, en el sofá de su casa. Seguramente se detuvieron a pensar sobre la dificultad de hacerle jugar a un individuo con un elemento externo, que debe manejar como una extensión de su propio cuerpo, con el añadido de una bocha mucho más pequeña de lo que es una pelota de fútbol. Interpretan a la perfección, mientras buscan el control remoto, que en el hockey el proceso de aprendizaje es más complejo y requiere mayor precisión e incorporación de conceptos antinaturales a la vida diaria del jugador.
Es obvio que también están perfectamente al tanto de que Ariel Holan fue uno de los 3 miembros del cuerpo técnico de Las Leonas que asistió con el equipo al Mundial de Australia en Mayo de 1990 (hace casi 27 años) y que luego salió campeón con la Primera de Lomas de Zamora 5 veces y ganó una medalla de Bronce en los Panamericanos de 2003 con Uruguay antes de dar el salto definitivo al fútbol…
Veintidós y un esférico
“El fútbol y el hockey son tácticamente iguales” Carlos Retegui
Veintidós personas, dos equipos, un esférico y dos arcos. ¿A qué les suena?. Como dice Carlos Retegui -entrenador de la Selección Masculina de Hockey ganadora de la Medalla de Oro de los Juegos Olímpicos Río 2016- el fútbol y el hockey son tácticamente iguales, con el matiz de la ley del offside, ya que en el deporte que se practica con el palo esta regla no existe. Por ello, conceptos sin balón como son la presión alta, orientar al rival para acorralarlo a la raya o anticiparse a los movimientos del adversario existen en ambos deportes.
Entrenar es enseñar, y aplicarlo en un deporte tan símil al fútbol, pero con la complejidad añadida del ya mencionado instrumento externo es una preparación más que válida para llegar al fútbol sin ser mirado de reojo. El actual presidente de River Plate, Rodolfo D’Onofrio, dijo que consideraba que un entrenador de hockey estaba perfectamente preparado para dirigir fútbol. La esencia es la misma, cuidar el elemento y tratar de convertir goles. En la marca y en la construcción hay similitudes. En la creación, el pase liso es una de ellas:
“El pase liso es el que se da sin efecto. Si te la paso con efecto, la recepción es más complicada que si te hago el pase fuerte y liso al pie y entonces mi segunda jugada es más sencilla. Y otra cosa importante es, antes de recibir, tratar de saber qué voy a hacer, tener una mínima idea de cuál será la segunda jugada por cómo están parados los rivales. Lo que tratamos de buscar es que la dinámica del juego se base en la velocidad de los pases.”
Al leer estas declaraciones del ex entrenador de Defensa y Justicia uno no puede identificar si se refiere al fútbol o al hockey, y eso denota que es difícil sostener argumentos válidos para cimentar aquella frase que dice “fue entrenador de hockey” como algo peyorativo.
“Quiero desmarque, que no nos quedemos quietos, pase fuerte, movimientos lanzados, recepciones dinámicas, todo lo que es la esencia del hockey.” -Ariel Holan
Aplicaba cosas de fútbol al hockey mientras aprendía sobre hockey. Esa simbiosis lo llevó a poder transmitir en Defensa y Justicia conceptos como aprovechar la amplitud del campo de juego, el pre scanning –mirar antes de recibir- y el pase liso, elementos que favorecieron la creación de una dinámica de juego que hizo que su equipo sea reconocido por gente como Javier Mascherano, César Luis Menotti o Diego Latorre entre otros.
Sin ignorar la enorme distancia en repercusión y presión que hay entre un deporte y el otro -diferencia que si bien no es menor, está solventada por su paso como colaborador de River Plate en la B Nacional- si uno se fija en aspectos tácticos, técnicos, conceptuales y pedagógicos la realidad nos marca que no hay tanta diferencia, ya que el objetivo de ambos deportes es igual: convertir goles. Quizás, los hinchas del fútbol deberíamos abrir la mente y dejar de ver como una amenaza la incorporación de conceptos de otras disciplinas -cualquiera sea- para comenzar a verlo como un aporte interesante que ayudará a la construcción de un mejor juego. Por ello, quizás a Ariel Holan habría que dejar de verlo con los ojos puestos en la diferencia entre la caja de resonancia entre el fútbol y el hockey para verlo con la esperanza depositada en el juego, y tener la fe de que él fue un entrenador de hockey, y quizás por ello puede traer aspectos renovadores y una brisa de aire fresco para el fútbol.