Luego de la ceremonia de premiación, Hockey Argentino Plus estuvo con las subcampeonas olímpicas a través de Matías Sartori, enviado especial en Tokio. Agustina Albertarrio, María José Granatto y Noel Barrionuevo cuentan lo que representa esta medalla para todo el deporte nacional y para un país entero.
Por Matías L. Sartori y Ezequiel Pernica (Agencia VEIEM 360) para Hockey Argentino Plus
Tokio (especial) | Las Leonas no se quieren ir más del césped azul. Del estadio Oi de Tokyo se han ido los dos equipos que completaron el podio. Países Bajos, las flamantes campeonas olímpicas, y Gran Bretaña, ganadoras del bronce tras superar a India. Sin embargo, Las Leonas siguen allí. Se sacan fotos, se abrazan mutuamente, lloran de alegría. Vuelven a abrazarse, una y otra vez. No quieren que el sueño termine, no quieren despertar. En menos de 24 horas tomarán un avión con destino a su país, pero no quieren irse.
Ha sido un torneo estupendo, donde el conjunto dirigido por Carlos Retegui superó enormes escollos para llegar al podio, en uno de los Juegos Olímpicos más difíciles de la historia debido al contexto, nacional y mundial. Son muchas las historias de deportistas que lucharon contra todo para poder estar en esta cita milenaria del deporte mundial. Las Leonas, no son la excepción.
Colgarse una medalla plateada un un Juego Olímpico es un enorme logro y un privilegio, más aún, en el primero sin público y con tantos palos en la rueda. Tokio ha sido prueba de la enorme tenacidad de la humanidad por salir adelante y estas Leonas son ejemplos de ello. Esos palos en la rueda, ellas lo convirtieron en sus mejores armas, con absoluta resiliencia.
Albertarrio: “Me siento una privilegiada”
“Estamos orgullosas. Esta medalla es de plata pero para nosotros es de oro, sufrimos mucho para poder estar acá. Me siento muy privilegiada”, admite una agotada Agustina Albertarrio, quizá más por las sensaciones vividas que por el desgaste físico en la cancha, que no ha sido poco.
En una sociedad resultadista donde muchos tratan de pelear contra esa mala costumbre desde donde se pueda, la de Lomas de Zamora le da una importancia incuestionable al metal que tiene colgado en su cuello: “es una medalla y cuesta un montón conseguirla. Vinimos a competir con un montón de equipos y hoy nos vamos con una medalla colgada en el cuello que pesa un montón… la tengo encima y es hermosa”.
“Lógicamente uno quiere la dorada”, agrega la número 7 de la Selección Argentina, “pero esta medalla es todo. Hicimos cosas que muy pocos hicieron, por eso siento mucho orgullo. No todo fue color de rosas, hubo muchas piedras en el camino y aún así seguimos”.
Por último, antes de abandonar la zona mixta, no pudo dejar de reflexionar sobre lo que significó este logro en contexto a lo que se vivió el último año y medio. “Están pasando un montón de cosas y ha sido un año muy duro con Pandemia y esto trae un poco de alegría. Quiero agradecerle a toda la Argentina por bancarnos y alentarnos, recibimos mucho apoyo”, finalizó.
Majo Granatto: “Todo el esfuerzo valió la pena”
María José Granatto se abraza con su hermana Victoria. La sangre del hockey corre por sus venas, sus otras dos
Maru y Delfina, también son jugadoras destacadas, pero solamente su hermana mayor Vicky es quien ha compartido el sudor dentro de la pista en estos juegos. Sudor y mucho más.
Las Leonas son mucho más que un equipo, transmiten valores deportivos y eso es un mensaje a todo un país. “eso es lo que nos gusta transmitir siempre, que el hockey sea un deporte de pasión, garra, compañerismo y humildad. Si transmitimos eso, nos vamos contentas, nos vamos llenas”.
Esta medallas que cuelgan de su cuello, son la prueba fehaciente de ello: “Una medalla olímpica no se gana todos los días, así que hay que saber valorarla y todo el esfuerzo valió la pena”.
“Lógicamente, hay una mezcla de sensaciones porque nos queríamos llevar una medalla dorada porque nos matamos entrenando para eso”, agrega la platense, “pero hoy no perdimos nada, sino que ganamos una medalla de plata y somos el segundo mejor equipo del mundo y que siempre hay revancha”.
“Estoy tranquila porque las cosas las hicimos bien”, finalizó la ‘Diez’ de Las Leonas.
Barrionuevo: “No siempre se llega a una final olímpica”
Noel Barrionuevo se acaba de bajar de su tercer podio olímpico y sumó su tercera medalla a su extenso palmarés, en el cuál se adjudica dos plateadas y una de bronce entre muchos otros trofeos. Confiesa que una sensación rara, ya que el objetivo era el oro, pero valora muchísimo esta medalla para el país : “La medalla de plata significa y vale mucho para este grupo”, admite.
“Estoy feliz por el grupo que se formó y por la entrega que tuvimos. No siempre se llega a una final olímpica y no cualquiera llega”, agrega la capitana de Las Leonas, quién se sonroja luego de de la pregunta por su posible presencia en los próximos juegos en la capital francesa: “No creo (risas) todavía queda mucho para París”.
Se va terminando el sueño olímpico, un sueño que hubo que rugir fuerte para conquistarlo, aunque ese sueño tenga un color distinto al anhelado. Y se ha tenido que rugir fuerte para llegar hasta aquí, hasta la tierra del sol naciente. Aquí, un sueño comienza pero otro nace inmediatamente, y Las Leonas van a seguir rugiendo fuerte por eso.