FIGURA PROMISORIA DEL HOCKEY ARGENTINO
(Gentileza: programa de radio “Sobre La Bocha”; informe: Fabian Simon para “Hockey Argentino Plus”; fotos Instagram: @candesuarezfotografia, @deelfigeru, @jmcorda)
En la edición N°20 del programa de radio “Sobre La Bocha”, emitido el día domingo 26 de Julio de 2020, la invitada fue Delfina Gerula, jugadora de Mar del Plata Club e integrante de la selección de hockey césped de Mar del Plata.
-¿Cómo la estás pasando en esta cuarentena?
“De a poco acostumbrándome a estar asi. Acá desde hace un mes que podemos salir a correr pero con muchas ganas de volver a jugar. Al principio de la cuarentena ya no sabía dónde ponerme a jugar al hockey y mis papás compraron un sintético para poner en el patio y me sirve para sacarme un poco las ganas de jugar al hockey.”
-¿Cómo entrenan con el club sabiendo que mar del plata se abrió un poco?
“De volver a los entrenamientos no tenemos novedades, creo que falta bastante. Desde que arrancó la cuarentena nos mandaron un plan físico pero cada una con sus horarios y martes y jueves tenemos zoom a la noche y nos vemos un poco para compartir el entrenamiento.”
-¿Cómo fue tu elección por el hockey a los 5 años?
“Lo que yo recuerdo fue mi primer deporte. Arranque a los cinco años, mi vecina jugaba al hockey y yo era muy amiga de ella y empecé ahí. Empecé en Biguá y me gustaba todo esto de ir a entrenar e ir los sábados a jugar. Lo que me acuerdo es que siempre me gustó meter muchos goles y cuando uno es chiquito, que tenes ocho o nueve años, me encantaba terminar el partido para contar y decir hice tantos goles.”
-¿Cómo fue cambiar de Biguá a Mar del Plata?
“Cuando jugué en los seleccionados de mar del plata, ahí ya había bastante diferencia entre las jugadoras de la A y B. Cuando pase a sexta división empecé a tener más amigas de otros clubes y otra compañera/amiga de Biguá se fue a Mar del plata, quise buscar nuevos objetivos y Carlos Muñoz, que estaba en la escuelita del Emder, empezó a entrenar en Mar del plata, empecé a averiguar y me encantó entrenar alla.”
-¿Qué te acordás de aquellas escuelitas del Emder?
“Lo que más me acuerdo es que iba desde la una del mediodía hasta las siete de la tarde. Los primeros meses no parábamos ni a merendar, hacíamos las siete horas de corrido y estábamos todo el dia. Mejoramos hasta el mínimo detalle, lo aproveché muchísimo porque el tiempo se te pasa volando. Y en cuanto a los seleccionados éramos muy chicas cuando vivíamos esas experiencias, uno no se daba cuenta la magnitud y un torneo que dura 3 dias para mi parecía un mes. Te cruzabas con equipos con los que no estás acostumbrado a jugar.”
-¿Qué entrenadores o entrenadoras te marcaron mucho en tu camino?
“De cuando era chica, uno siempre se acuerda de los entrenadores que tiene en séptima, porque ya pasas a competir. Me acuerdo de Rodrigo torres, que lo tuve en séptima en Biguá y salimos campeonas los dos años. Cuando me pasé a Mar del plata, estuve con Lucas que también salí campeona, vale naval que también Salí campeona y el más importante es Carlos Muñoz, que no solo lo tuve en escuelita, sino que ahora también está en el club aca en Mar del plata, pero resalto esas siete horas de escuelita. Él nos mostraba videos de jugadoras internacionales y nos hacía mirar hasta el último detalle de cómo ponían el pie esas jugadoras, entonces eso hizo que yo quiera perfeccionarme y entrenar al 100%.”
La producción consiguió un audio de Carlos Muñoz, quien fue su entrenador en las escuelitas del Emder y actualmente es el entrenador de ella en su club. Luego de escuchar el audio, Delfi logró describirlo en una frase: “Él es apasionado con el deporte como yo. Compartimos esa pasión con Carlos.”
-Tenes una medalla del año que que vos naciste, ¿es verdad?
“Es verdad. No me acuerdo bien mi edad, pero me acuerdo que cuando estaba en Biguá, uno de mis entrenadores que se llama Mariano, me regaló esa medalla que era de un argentino. Cuando uno ve las medallas de los argentinos, decis quiero más y ahí fue un puntapié de querer estar en los seleccionados de la ciudad y querer tener mis medallas.”
-¿Te inspiraste en alguna figura para decir “quiero más”? ¿Tenes alguna idola de leonas?
“Si, en el 2014 cuando pasó lo del mundial, la despedida de lucha en el champions Trophy, empecé a ver mucho más a las leonas y a que me llame más la atención el juego internacional. Ahí cuando uno empieza a ver todo eso, le nace de adentro estar ahí y entrenar todos los días para llegar a estar ahí. Principalmente a Delfi Merino, desde que soy muy chica pero Carlita Rebecchi es crack, Juli Janku, Euge, Majo, que son delanteras y me encantan. Soy de ver a una sola, sino que veo a todas para poder adaptarlo a mi juego para tener mi mejor versión.”
-¿Cómo vivís el torneo? ¿Es una presión o estás tranquila?
Es una presión pero yo creo que lo podes disfrutar igual. Es muy lindo que la gente de afuera espere algo de vos y es algo muy positivo y llegas a ese plus mental en donde digo: puedo llegar a más. Es una presión que la transformás en motivación y hace que cada torneo sea mejor y que puedas mejorar tu rendimiento en cada torneo que se viene.”
-El año pasado jugaste el regional de Bahía Blanca, ¿Cuánto sirvieron esos torneos?
“En el momento fue durísimo porque con el club habíamos entrenado un montón y el torneo fue duro porque tuvimos muchas lesiones. Pero uno se creaba la ilusión porque iba ganando todos los partidos y llegar a la final y perderla pegó un poco. Pero a las dos semanas fuimos a jugar el regional con la quinta y cuando llegamos a la final, parecía que lo teníamos ahí, y otra vez se nos escapó de las manos. Creo que al fin y al cabo nos dio fuerzas como equipo para llegar a fin de año y demostrar todo.”
-Te toca el penal definitivo, ¿Cómo viviste ese momento? ¿Cómo te sentiste en el último penal?
“Fue una final de locos, para hacer una película. El primer partido entramos super bien, ganamos 3-1 y parecía que ya estaba, que al otro día íbamos y nos daban la medalla. Estábamos 3-0 perdiendo y cuando hay penal para ellas, todas dijimos listo ya esta y la arquera atajó y dijimos revivimos. Cuando llegamos a los penales, era una tanda eterna y me tocó tirar el último penal, pero yo no sabia que era el último. Me puse quinta para tirar, pero cuando ellas van a tirar el cuarto, una compañera me dice: si la ataja, vas vos, yo no llevaba ni la cuenta. Cuando voy caminando, acomodo la bocha y ahí me cae la ficha: si lo meto, nosotras ganamos, no pude reaccionar pero gracias a dios no me di cuenta. Cuando lo meto venia una marea verde encima mio pero en el momento que camine a tirar, no sabía que con ese ganábamos.”
-¿Cuál es tu punto fuerte?
“Yo creo que mi punto fuerte es en todo lo que es habilidad individual y me gusta mucho lo aéreo. Me gusta mucho: dribbling aéreo, salta pelotita. Me gusta mucho la definición de revés, y lo que más estoy entrenando ahora es el roce físico. Quiero jugar más con el contacto y no ser tan chiquitita y cuidadosa, sino que ser más agresiva.”
-Tuviste tu primera concentración nacional con el sub 21, ¿Cómo fue ese llamado? ¿Puede ser que estabas en el colegio?
“Si. Fue el año pasado y yo estaba en ingles en el colegio, y el celular estaba abajo del banco y no paraba de vibrar por los mensajes y pensé que era la lista del sábado para ver quien jugaba. Cuando lo agarro, veo que me convocaron a la concentración nacional sub 21, no lo podía creer, mis amigas no entendían mucho, yo contenta pero nadie entendía lo que significaba. El momento fue increíble, me lo voy a acordar por siempre.”
-¿Cuáles son tus objetivos para el año que viene?
“Ahora con todo esto de la pandemia, uno tiene tiempo para pensar en el futuro y en lo que quiere. Estoy casi segura que el año que viene voy a ir a jugar el metropolitano, es un deseo que tengo desde muy chica. Quiero crecer y tener experiencia, para no quedarme en la zona de confort. Al estar el mundial y panamericano junior, quiero luchar por un lugar en esos planteles pero también seguir creciendo y disfrutando para llegar a lo más alto posible.”
-Echando a volar la imaginación, ¿Cuáles son tus sueños?
“Creo que como todo deportista, uno siempre sueña con jugar un juego olímpico y formar parte de la selección nacional que uno representa, pero hay que ir paso a paso. Un sueño enorme y que todos quieren vivir, es un evento en donde todos los mejores llegan a competir y quiero estar ahí.”
