Victoria Granatto, recientemente convocada a entrenar con el plantel de Las Leonas, habló en exclusiva con diario Hoy, acerca de sus sensaciones y deseos a futuro.
(Fuente: Diario Hoy; Fotos:diario Hoy / H. F. )
Un feriado distinto. En el predio de Gonnet se vivió una jornada llena de hockey, en donde Santa Bárbara se impuso con autoridad 3 a 1 sobre el CASI, con goles de Mariquena Granatto (2) y Delfina Granatto. Santa venía de lograr un triunfo importante el sábado ante Lomas, por lo que pudo sumar seis valiosos puntos en casa.
Victoria Granatto, la mayor de las hermanas que juegan en Santa, atraviesa horas de una alegría inmensa. Gabriel Minadeo, técnico del seleccionado argentino de hockey, la convocó a entrenar con el plantel mayor, en donde realizará un proceso de adaptación para sumarse a Las Leonas.
—¿Cómo vivís este momento?
—La verdad que es una felicidad muy grande, algo que estoy esperando desde hace mucho tiempo, para lo que me estoy entrenando. Me siento muy segura y voy a dar lo mejor de mí, obviamente que es un primer paso, sé que tengo que ganarme un lugar, pero estoy disfrutando el momento y sé que voy a hacer bien las cosas.
—¿Cómo fueron tus inicios?
—Yo arranqué jugando en el CUQ (Círculo Universitario de Quilmes) junto con mis hermanas. Mi infancia la viví en Varela, pero hace quince años que nos mudamos a La Plata. A partir de ese momento, llegamos a Santa Bárbara. Hace ocho años que juego en Primera división, por lo que es un orgullo poder medirme con las mejores del país. Lo voy a disfrutar.
—¿Qué se siente poder jugar con tu hermana en la selección?
—Es algo especial, muy lindo y un orgullo. De todas formas, Majo está abocada con el seleccionado Junior porque tienen el Mundial a fin de año. Obviamente que compartirlo con la familia es algo importante, me pasa acá, que estoy todo el tiempo con mis hermanas, es algo que te fortalece. Es un plus disfrutarlo con la familia.
—¿Qué referencias tenés sobre el técnico de Las Leonas?
—La única referencia es la que me dio mi hermana Majo, que tiene un vínculo muy importante con Gabriel, ya que la hizo sentir muy segura en su etapa de adaptación, la supo llevar y darle la confianza necesaria para que ella juegue. Sobre todo desde la parte humana.
—¿Qué representa Santa Bárbara para vos?
—Es una responsabilidad muy grande vestir esta camiseta, estamos muy comprometidas, no solo en lo deportivo. Hoy en día el club marca la agenda de todas nosotras, es por eso que tenemos un vínculo muy fuerte con la institución, con Inferiores. Representar a Santa siempre es un orgullo.
—¿Tus deseos a futuro?
—Poder demostrar que tengo muchas cosas para dar. Ahora, a fin de mes, tenemos el torneo con el seleccionado de Buenos Aires, así que mi objetivo es poder hacer un buen papel, que me dé confianza para ganarme un lugar. Igual, siempre tranquila, voy a tratar de disfrutarlo, dejando todo y haciendo las cosas lo mejor posible.