Su incursión en la Liga Nacional B: “Una gran experiencia que hay que saber aprovechar y capitalizar pensando a futuro”, sostuvo Rocío Martino.
(Fuente: ASH)
La Salle llegó hasta la Liga Nacional “B” disputada en Rosario y arrojó distintas sensaciones, que volverá al Regional “A” el próximo año (descendieron 11 equipos). Las chicas se caracterizaron siempre por la constancia de buscar siempre desde el inicio hasta el final, más allá de que se dieran los goles o no. Rocío Martino, una de las referentes y líderes, analizó el certamen y el aprendizaje que deja jugar en esta competencia. En sus palabras, queda claramente reflejado la mentalidad de ella y sus compañeras: debe servir para no perder la búsqueda, la intención y el deseo de ir por más en un equipo protagonista, intenso y con ganas de seguir peleando. Todas ellas forman un grupo con hambre de gloria, y ganas de seguir ganando, fiel a un estilo competidor distintivo de los grandes.
La mediocampista brindó su punto de vista sobre el desempeño del equipo en cada partido. “El rendimiento fue superior al que veníamos teniendo en el torneo local. Pudimos plasmar nuestro sistema, se hizo lo que se planteó y dimos el máximo. Con Duendes hicimos un muy buen partido, tiendo en cuenta que fue el debut y que por lo general, cuesta un poco adaptarse pero el equipo enseguida lo logró. Con poco tiempo de recuperación, tuvimos el partido con La Salle de Córdoba, un excelente equipo, con mucha técnica individual y ritmo diferente que te lo da obviamente la competencia local que tienen. Ellas marcaron la clara diferencia que existe. De hecho resultó ser el campeón ganando una final 3-0. Con Alemán y Uni de San Juan fue mucho más parejo”.
Además, amplió su observación para especificar que “un décimo puesto no suena tan lindo pero desde un análisis más amplio, empatamos con Duendes 2-2, (ellas pelean y son protagonistas de su torneo en Rosario junto a Jockey y Provincial) siendo nosotras las que generamos más oportunidades de gol, perdimos con el campeón de la Liga 5-0 (ellas en su primer partido y nosotras en el segundo, igualmente la diferencia existe). Vencimos a Alemán de Mendoza 2-0 y el último partido ante Universidad de San Juan caímos 1-0, faltando dos minutos para terminar el partido. De nuestra zona salió el campeón y el cuarto puesto”.
La Salle deberá absorber la enseñanza y conocimientos que arrojó disputar este torneo. “Competir en este tipo de torneos es una gran experiencia, medirte con equipos más competitivos es una gran oportunidad que hay que saber aprovechar y capitalizar pensando a futuro. Fue una experiencia positiva y de la que hay que aprender mucho, éramos el único equipo que no cuenta con cancha de sintético propia, y nuestra competencia local no es la misma que se da en otros lugares”, afirmó Martino.
De ahora en más, las “lasallanas” buscarán potenciar sus cualidades y detectar en que son vulnerables para tener un juego mas convincente y sólido al que poseen. “Tenemos que mejorar el ritmo de juego, como te decía antes, que te lo da la propia competencia. Eso hay que buscar, la estrategia correcta para optimizarlo. Sin dudas que es un gran desafío para La Salle. En cuanto a nivel técnico y táctico siempre hay cosas que mejorar y aprender. Todas vimos partidos y también los entrenadores lo hicieron. Ahora es cuestión de ponerse a trabajar para aprovechar al máximo todo lo que nos dejó el torneo. El beneficio de haber estado en Liga B es y será amplio, no es lo mismo no haberla jugado nunca. Nos deja el deseo y la pasión de mejorar todo lo que vimos que nos falta, confiar en el proceso y volver”, manifestó Rocío para cerrar su conclusión.
