Tucumán Damas: LAS “NARANJITAS” SUB 21 REALIZARON UNA INÉDITA PREPARACIÓN FÍSICA

Las chicas se trasladaron hasta la zona del dique El Cadillal para realizar un entrenamiento de alto rendimiento dirigidas por especialistas.

(Fuente: La Gaceta; Fotos: Rubén Matos y Santiago Zapatiel)

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DESAFIANDO AL FRÍO. Las jugadoras del plantel “Naranja” estuvieron casi tres horas en el agua, mojadas y remando. Los entrenadores Cristian Leyes y Fernando Torres trabajaron junto a sus dirigidas.

 

El seleccionado Sub 21 de damas se prepara para competir en el Campeonato Argentino a desarrollarse en Córdoba del 21 al 25 de este mes. Las integrantes del plantel saben que para encarar ese desafío necesitan una preparación física especial. Y para alcanzar la puesta a punto ideal no escatiman esfuerzo.

Las chicas se trasladaron hasta la zona del dique El Cadillal para realizar un entrenamiento de alto rendimiento dirigidas por especialistas. El trabajo estuvo compuesto de varios ejercicios novedosos. Uno de ellos fue remar con los ojos vendados. “Esta práctica sirve para aumentar la confianza en la compañera y mejorar la comunicación. Generalmente se apoya la comunicación estrictamente con las palabras. A las chicas les pasamos una serie de videos donde queda en evidencia que la comunicación es importante”, explicó Sergio Wilde, uno de los que llevó adelante la preparación de las “naranjitas”.

Los especialistas diseñaron ejercicios para demostrar que la comunicación verbal tiene sus errores y para que las jugadoras entiendan que si no confían en sus compañeras, el equipo pierde el rumbo. “Las chicas, al trabajar con los ojos tapados, aprenden a escuchar, perciben otras sensaciones de orientación y aromas”, agregó el titular de la Cátedra de Entrenamiento de la Facultad de Educación Física y del Laboratorio de Evaluaciones de la Facdef.

Manejar las frustraciones

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En otro tramo de la preparación, el plantel realizó tareas para saber manejar las frustraciones. Para eso hicieron equilibrio con una pelota de tenis colocada en la punta de un palo. “Es un ejercicio de un equilibrio muy frágil y muy difícil. Ese palo era sostenido por las jugadoras a través de un hilo. Casi siempre la pelota tiende a caerse y es allí cuando uno detecta cuál es el deportista que no supera la adversidad; quiénes ejercen el liderazgo y quiénes se frustran fácilmente. Esto permite descubrir a aquellos integrantes que. sin tener iniciativa, acatan la consigna del grupo. Todos estos perfiles psicológicos ayudan a los entrenadores a desarrollar estrategias superadoras en beneficio del equipo”, señaló Wilde.

“El entrenador nos pidió que trabajáramos mucho sobre la comunicación entre las jugadoras y la conformación del grupo. Hicimos una charla formando un círculo. Les explicamos que si miran atentamente al rostro de la persona que habla la comunicación es más efectiva. Con esto buscamos que las jugadores mejoren la convivencia a nivel grupo” destacó.

La ayuda de la ciencia
Los Juegos Olímpicos mostraron la importancia que tiene la ciencia aplicada al deporte. “La ciencia y la tecnología ayudaron a mejorar el desarrollo físico, técnico y estratégico. La única manera de avanzar es mediante actividades psicológicas y sociales en los grupos. La mayor parte de este trabajo que se hizo con el seleccionado Sub 21 fue dirigido a esos aspectos. También brindamos asesoramiento sobre la alimentación y algunas cargas físicas que no las hicimos en este coaching, porque lo que buscamos es que identifiquen sensaciones de malestar y de dolor. Las chicas estuvieron casi tres horas en el agua, mojadas y remando. El objetivo era que aislen mentalmente el ruido que genera la fatiga por el dolor o por el frío y enfocarse. Otro de los temas que hablamos es que los equipos necesitan tener focos en sus objetivos. No hicimos hincapié en lo físico pero sí en lo psicológico y social”, concluyó Wilde

El éxito es el resultado de la motivación y del desarrollo, no sólo personal sino también a nivel equipo. Así lo entendieron las chicas del Sub 21 que el año pasado consiguieron el subcampeonato argentino en nuestra provincia y ahora encararon esta preparación del alto rendimiento, que no es habitual en un deporte amateur. Ellas quieren volver a ser protagonistas y tienen el potencial necesario para lograr lo que se les negó el año pasado: el título de campeonas argentinas.