(Fuente: Suplemento “Ovación” del diario “La Capital”; cronista: Vanesa Valenti) 
En una noche inolvidable que tuvo como escenario un Estadio Mundialista colmado, el equipo rojo jugó un partido impecable y superó a Universitario gracias al gol de Julieta Acosta.
Dicen que a las finales hay que ganarlas como sea. Pero, ¿cuánto mejor sabor tiene quedarse con un título como lo hizo ayer Provincial, priorizando las formas? ¿Y qué decir si ese título es el primero de tu historia? En una noche inolvidable que tuvo como escenario un Estadio Mundialista colmado, el equipo rojo jugó un partido impecable, superó a Universitario y gracias al gol de Julieta Acosta se convirtió en el flamante y primerizo campeón del torneo de la Asociación de Hockey del Litoral.
En 2012, cuando Provincial asomó la cabeza entre los equipos peleadores, cuando por primera vez se metió en una Liga de Honor (los mejores ocho de la vieja Liga Nacional), este presente no podía pensarse como utópico. Un equipo aún hoy joven, pero con individualidades que dan que hablar algo debía traerse entre manos. En 2013, el equipo rojo fue campeón de la sede Rosario, también de la Liga Nacional y nuevamente se metió en Liga de Honor, que irrisoriamente se definió en marzo de 2014. En octubre, de nuevo por Liga Nacional, aunque con nuevo formato, volvió a ser protagonista y disputó la final justamente con su rival de anoche, que lo superó bien en la definición. Tan cerca, pero a la vez tan lejos empezaron a mostrarse los títulos para Provincial, que ayer, ante su primera final por el torneo local no quería fallar.
El equipo que conduce Ernesto Morlan, gran artífice de la resurrección y del crecimiento del hockey de Provincial, salió a la cancha a “comerse a su rival”. Dispuso un planteo para anular sin atenuantes a los cerebros universitarios y presionó desde el minuto uno. Por eso no sorprendió que a los 14′ Julieta Acosta haya puesto en ventaja al equipo de Barrio Cura. La Negra capturó un rebote en el área rival, se tomó sus milésimas para pensar y burló el esfuerzo de la arquera Laura Del Colle, que ya había tapado varias. Explotó gran parte del público. Fue un grito con alma y vida, un deseo contenido cargado de significación.
Firme en la defensa, rudo y a la vez creativo en el medio y muy picante adelante. Así se mostró Provincial, que se llevó el primer tiempo con absoluta autoridad e inició la segunda parte a toda máquina otra vez, borrando durante muchos pasajes al mejor equipo de la fase regular (Uni terminó primero, con 55 puntos) y reciente campeón de Liga Nacional. Promediando la mitad del complemento el partido se acható un poco, en el blaunegro se notó el nerviosismo y las imprecisiones y Provincial intentó poner paños fríos al resultado teniendo la bocha en el palo. Así y todo, el encuentro nunca perdió atracción. A fin de cuentas estaban cara a cara los mejores del año.
Este campeón no se discute, aunque al subcampeón no hay que quitarle aplausos por la enorme temporada. Pero ayer el que primó fue Provincial en todas las facetas. Hubo córners para ambos lados: cinco para Provincial, cuatro para Uni, pero no llegaron por esa vía las situaciones más peligrosas que tuvieron casi exclusivamente a un sólo creador. Y si Provincial no lo definió antes fue porque Laura Del Colle jugó un partidazo cerrando las puertas de su arco, incluso en el primer tiempo le contuvo un penal a Eugenia Rambaudi.
El 1 a 0 fue suficiente para empezar a escribir esta historia que promete seguir sumando capítulos. Provincial demostró que, tarde o temprano, a todos les llega su hora. Más aún si nunca se bajan las banderas del trabajo y de la enjundia. Por eso va el deseo de salud hacia este nuevo campeón.
